Alguién que solo haya visto las películas de Conan y no haya leído la obra original tendrá en la cabeza a un personaje radicalmente distinto de aquel cuyas crónicas escribió Howard. ¿Por qué? Veamos los errores más flagrantes.
Alex Sebastián
Alguién que solo haya visto las películas de Conan y no haya leído la obra original tendrá en la cabeza a un personaje radicalmente distinto de aquel cuyas crónicas escribió Howard. ¿Por qué? Veamos los errores más flagrantes.